El teléfono erótico o sexo telefónico destaca por consistir en una clase de sexo virtual la cual se trata básicamente de conversaciones eróticas que tienen lugar mediante el teléfono entre un par de personas o más.
Descubre el teléfono erótico
Pese a que no se trata de un requisito imprescindible, por lo general al acudir a telefonos eroticos, uno o ambos interlocutores suelen acompañar la conversación con otro tipo de acciones sexuales, como por ejemplo, la masturbación.
Los límites que pueden existir al llevar a cabo esta práctica, están delimitados únicamente por las personas involucradas en la conversación, por lo que en muchos casos es posible que los participantes decidan que la experiencia se vea complementada por narraciones eróticas, órdenes sexuales, anécdotas y confesiones de carácter sexual, al igual que discusión de asuntos personales y/o sensuales e incluso reducirse solamente a gemidos, jadeos y otros ruidos sexuales, al mismo tiempo que una de las personas involucradas o ambas se masturban.
El negocio de los teléfonos eróticos
También llamadas líneas eróticas, los teléfonos eróticos se caracterizan por tratarse de servicios que ofrecen determinadas empresas, las cuales cobran una tarifa a cambio del tiempo que los clientes deseen mantener una llamada con alguna de las trabajadoras que se dedican a este tipo de trabajo.
Hay que señalar que si bien suele ser común que el sexo telefónico cuente con otra persona como destinatario, es decir, las trabajadores eróticas, lo cierto es que se pueden encontrar igualmente otras empresas que ofrecen servicios con grabaciones, ya sean de narraciones acerca de relatos eróticos o de parejas teniendo relaciones sexuales.
De la misma forma conviene mencionar que las líneas eróticas consisten en uno de los modos de trabajo que se encargan de explotar tanto la sexualidad como la sensualidad de las trabajadoras con el propósito de satisfacer los deseos que puedan tener los clientes a cambio de dinero.
Y aunque en algunas ocasiones puede ser un trabajo que para varias personas se encuentra mal visto, la verdad es que para otras supone un trabajo y una fuente de ingreso tan seria como cualquier otra.
El negocio de los teléfonos eróticos suele mover alrededor de 4.500 millones de dólares a nivel global y pese a que para la mayor parte de las personas que se dedican a este trabajo suele ser una actividad temporal que llevan a cabo mientras logran salir de alguna situación económica difícil, lo cierto es que para muchas otras se trata de un trabajo que han desempeñado durante muchos años, el cual incluso les ha permitido comprar automóviles, casas y mantener un cómodo estilo de vida.
De igual modo cabe mencionar que las personas que se dedican a trabajar en teléfonos eróticos siempre cuentan con la alternativa de trabajar tanto de manera independiente al optar por contratar alguna línea telefónica y promocionar sus servicios mediante internet, como de trabajar junto a alguna de las principales empresas que se encuentran dentro de esta gran industria.
En este último caso, los clientes de este servicio logran encontrar con mayor facilidad las líneas eróticas ofrecidas por las grandes empresas en comparación con los servicios que pueda ofrecer alguna persona independiente.
Aparte de eso, existe la certeza de que se trata de llamadas que son controladas a través de centralitas, por lo que en caso de presentare cualquier inconveniente habrá un mediador listo para intervenir y finalizar la llamada.
Los trabajadores y la empresa
Los operadores de un teléfono erótico consisten en actores eróticos y trabajadores sexuales.
Puede decirse que dentro de los atributos más valorados en este tipo de profesionales dedicados al sexo telefónico, suelen destacar por lo general la voz, la soltura para interpretar distintos roles sexuales o eróticos y la habilidad de actuación, al igual que la experiencia.
Y aunque la mayoría de trabajadores de este negocio suelen ser mujeres que atienden, usualmente a clientes varones, también existe un pequeño ramo de la industria que se dedica especialmente a clientes gay.
Y si bien es cierto que en algunas ocasiones suelen participar activa y completamente dentro del erotismo que envuelve a este tipo de llamadas, ya sea masturbándose o llevando a cabo algún otro acto sexual (como por ejemplo, el uso de consoladores, etc.), la mayor parte de las trabajadoras eróticas no se masturban durante sus horas de trabajo, sino que en su lugar simulan que se encuentran haciéndolo y/o interpretan diversos roles dependiendo de lo que pueda desear cada cliente.
La finalidad de los teléfonos eróticos
El propósito principal de los teléfonos eróticos consiste en el de ofrecer una ayuda ante la masturbación de los clientes.
Sin embargo y en ciertos casos la función de las trabajadoras suele ir un poco más allá por lo que actúan como válvula de escape para aquellos clientes que quieren confesar tanto sus inquietudes íntimas como sus sentimientos frente a una persona neutral y anónima.
Para terminar podemos mencionar que varias empresas disponen de call centers y otras solo redirigen las llamadas hacia el móvil de sus trabajadoras.
Generalmente los teléfonos eróticos eran contestados por una recepcionista, la cual recibía el pago y se encargaba de conectar a los clientes con alguna de las trabajadoras eróticas, ya sea de manera aleatoria o con alguna previamente seleccionada de acuerdo a sus necesidades y deseos.
Debido al nacimiento de internet y plataformas especializadas, las trabajadoras pueden describir sus servicios a través de una página Web para que los clientes las elijan con mayor facilidad.